El blog de 道


Lie Zi, y 3 (列子,三)
31/05/2016, 7:32 am
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El maestro Lie Zi dijo:

Sueño es lo que encuentra nuestro espíritu; realidad lo que afecta a nuestro cuerpo. Por eso, los pensamientos durante el día y los sueños durante la noche proceden del cuerpo o del espíritu. Y por eso, también, quien concentra su espíritu ve cómo se extinguen sus sueños y pensamientos. Creer en nuestras experiencias de la vigilia como creer en nuestros sueños supone no entender el constante ir y venir de la cambiante realidad. Los zhen ren (hombres auténticos) de la remota antigüedad se olvidaban de todo en su vigilia y no tenían sueños cuando dormían. ¿Acaso todo ello no es puro vacío?

– 列子, El libro de la perfecta vacuidad (aprox. siglo V a.C)



Las cinco puertas 五關

Por el cuarto ancestro zen, Dayi Daoxin (siglo VII):

Entiende esto: Buddha es esta mente. Fuera de esta mente no hay Buddha. Brevemente, sugiero que hay cinco principios básicos:

Primero: Conoce la esencia de la mente. La naturaleza esencial es pura. La esencia es Buddha en sí misma.

Segundo: Conoce la función de la mente. Su función da lugar a la joya del Dharma. Funciona sin obstrucción, pero siempre está en calma; incluso los diez mil engaños son en esencia solo esto.

Tercero: El Constante Despertar no tiene final. La mente Despierta siempre está presente. La Enseñanza de este Despertar es sin forma.

Cuarto: Entiende siempre que el cuerpo está vacío y tranquilo. Dentro y fuera son transparentes entre ellos. Tu cuerpo surge enmedio de la realidad última. Nunca han habido obstáculos.

Quinto: Mantén un mindfulness-unificado sin desviación. Ambos, movimiento y quietud no van a parte alguna

Aquellos que practiquen esto claramente verán su naturaleza búdica y entrarán en la puerta de la práctica sin vacilación.



Esté mentalmente en bancarrota
29/01/2016, 9:15 am
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Estar mentalmente en quiebra es liberar la mente de apegos. Una mente sattvica refleja la realidad claramente, como el agua clara refleja el sol. Cuando no quiere nada y no se agarra a ninguna cosa usted es libre. Eso es auténtica renuncia. Aunque pueda tener posesiones, si no se identifica con ellas o dice: «mío», no le pueden atar. De hecho nada es suyo, porque «usted» no existe.

-Sri Ranjit Maharaj/Andrew Vernon (en «Tú eres él» de Andrew Vernon),



Sobre el no-pensar (非思量)
19/01/2016, 9:34 am
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Incluso entre meditadores avanzados es habitual la polémica del «no pensar».

Pareciera como si algo se resistiese fuertemente a aceptar que «eso» de nuestra cabeza es mero lenguaje sin demasiada influencia sobre la acción y por tanto bastante prescindible. Casi (o sin el casi) un simple malfuncionamiento mental (casi neurosis).

La realidad es que la mayor parte del tiempo, lo que pensamos no tiene relación alguna con la acción que desarrollamos. Un ejemplo aplastante es el conducir. Casi nadie piensa en nada relacionado con el conducir mientras va al trabajo, piensa en lo que le espera ese día o en cualquier fantasía pesonal.

Así pues, ¿qué utilidad para la conducción tenía el pensamiento consciente en esa situación? Ninguna. ¿qué perderíamos en su ausencia? ¿si no estuviera? Nada, conduciríamos exactamente igual (seguramente mejor, pues la atención no estaría en el pensamiento sino en la conducción).

Es una falsedad habitual asociar estas acciones sin pensamiento consciente  relacionado a «procesos mentales inferiores» o automatismos. Es decir, se dice «lo que pasa es que esto lo tengo automatizado por eso puedo conducir y pensar en otra cosa».

Pero eso es evidentemente falso.

Puedes conducir así (y de hecho lo haces cada día) en un entorno tremendamente complejo, cosa que hoy dia no sabe hacer ni el robot más sofisticado (google está en ello invirtiendo billones). Puedes hacerlo sin dedicar ni un pensamiento consciente al más complejo de los tráficos. Ahí no hay nada automatizado excepto en las agrupaciones de movimientos de «como se cambia de marcha» y poco más.

Es paradójico que digamos que eso es «un automatismo» y cuando un mismo pensamiento reaparece por octava vez en nuestra mente (sin haber sido llamado y a veces contra nuestro deseo) sea «yo» o «mi pensamiento» pero nunca «un automatismo»… Es una muestra de cuan esclavos somos de la creencia (falsa) de que «somos pensamientos».

Pero es que de hecho haces casi todo en ese estado de «sujeto despistado», no solo conducir, lo que pasa es que no reparas en ello… solo tras entrenar tu mindfulness diario (fuera del cojín) empiezas a darte cuenta. Y ese «ver» es parte del «ver» que es necesario para «ver». 🙂

Verás que ocurre lo mismo cocinando, en el gimnasio, paseando, etc…

Ocurre casi siempre menos cuando hablas o escuchas (o escribes o lees).

Curioso ¿no? si afirmamos que solo podemos pensar «en otra cosa» cuando la tarea está automatizada me temo que vas a llegar a la conclusión de que casi toda tu vida está automatizada (que no deja de ser una conclusión bastante interesante).

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Pensar es, de hecho, un fenómeno que ocurre espontáneamente. Hay muchos tipos diferentes de pensamientos que responden a diferentes tipos de estímulos; pero todos ocurren mecánicamente. La dificultad o confusión surge a causa del ego. El ego es un tipo de «meta-pensamiento» que abarca todos los otros pensamientos. Este «yo-pensamiento» le da la sensación de que usted está pensando sus pensamientos cuando, de hecho, no es así. El ego es en sí mismo un pensamiento. Así el pensamiento es lo que está pensando. Por esto es por lo que Maharaj dice: «no piense en nada». La intención no es tratar de dejar de pensar, lo cual es imposible, sino romper la identificación con los pensamientos; esto es, separarse de los pensamientos. Usted es la Realidad sin pensamientos, a la cual Maharaj aquí llama «no-mente».

-Sri Ranjit Maharaj



Meditación y Krishnamurti
04/01/2016, 10:35 am
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Aquí hay un bello fragmento de los diarios de Krishnamurti donde describe su meditación diaria.


Early this morning, somewhat before sunrise, meditation, in which every kind of effort has long ago ceased, became a silence, a silence in which there was no centre and so no periphery. It was just silence. It had no quality, no movement, neither depth nor height. It was completely still. It is this stillness that had movement expanding endlessly and the measurement of it was not in time and space. This stillness was exploding, ever moving away. But it had no centre; if there was a centre, it would not be stillness, it would be stagnant decay; it had nothing whatsoever to do with the intricacies of the brain. The quality of the stillness which the brain can bring about, is entirely different, in every way, from the stillness that was there this morning. It was a stillness that nothing could disturb, for it had no resistance; everything was in it and it was beyond everything. The early morning traffic of lorries bringing foodstuff and other things to the town, in no way disturbed that stillness nor the revolving beams of light from the high tower. It was there, without time.


Esta mañana temprano, en algún momento antes de la salida del sol, la meditación, en la cual toda clase de esfuerzo hace tiempo que desapareció, se volvió silencio, un silencio en el que no había centro y por ello tampoco periferia. Era solo silencio. No tenía cualidades, movimiento, ni profundidad ni altura. Era completamente calmada. Era esa quietud que posee movimiento expandiéndose sin fin y su medida no era en tiempo ni espacio. Esa calma explotaba, siempre alejándose. Pero no tenía centro; si lo tuviera, no sería calma, sería decadencia estancada; no tenía nada que ver con las complejidades del cerebro. La cualidad de la calma que el cerebro puede traer, es totalmente diferente, en todo aspecto, de la quietud que había esta mañana. Era una quietud que nada podía perturbar, pues no tenía resistencia; todo estaba en ella y ella estaba más allá de todo. El tráfico matutino de los camiones que traen alimentos y otras cosas a la ciudad, de ninguna manera alteraba esa quietud ni tampoco los rayos de luz de la alta torre girando. Estuvo allí, sin tiempo.

– J. Krishamuti (Notebook)

 




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