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Establecer la identidad de los pensamientos y percepciones – la expresión
Mantén la misma postura que se mencionó anteriormente. Ahora, permite que un estado de pensamiento fuerte y grosero, como la ira, ocurra dentro del estado vacío y consciente de la mente no identificable. Cuando haya surgido vívidamente, míralo directamente e investiga, como antes, su color y forma exactos, su ubicación y soporte, su identidad y apariencia, y así sucesivamente. De la misma manera, deja que surja un estado de pensamiento sutil o proyecta uno, y luego mira y examina su identidad.
Del mismo modo, deja que surja o se produzca una variedad de percepciones sutiles y groseras: del mundo y sus seres, enemigos y amigos, alegrías y tristezas, y así sucesivamente. Investiga la identidad de cada uno. Escudríñalo y examínalo.
Antes, cuando mirabas, tal vez lo hacías generalizando la falta de entidad definible, o no examinabas y no lograbas obtener una experiencia precisa. Si es así, solo has ganado la teoría de que los pensamientos y percepciones sutiles y groseros son inidentificables. Por lo tanto, no habrás encontrado la experiencia continua y constante de liberación que es poder reconocer directamente su identidad al encontrarlos o dejar que su falsedad colapse. Por lo tanto, ponte la armadura de la fortaleza y continúa examinando hasta que hayas resuelto este punto de manera decisiva.
Al hacer esto, se alcanzará una certeza profunda, ya sea uno de una perspicacia superior o inferior. Por lo tanto, este tema (hipótesis) no debe dejarse incompleto o como una idea general.
Luego, para continuar ganando experiencia personal, examina un pensamiento o percepción en particular. Ahora puedes decir: No tiene ninguna forma, color o identidad definible. ¡La identidad de la mente es simplemente un vacío consciente! O puedes dar una respuesta práctica (realizar) a esta comprensión teórica.
Sin embargo, no es seguro lo que quieres decir con vacío consciente. ¿Te refieres a un vacío consciente que ocurre después de que un pensamiento haya cesado o se haya disuelto? ¿O es un vacío consciente mientras el pensamiento está presente? En este último caso, se puede decir que el Estado es consciente, pero no tiene sentido decir que está vacío. Escudriña de esta manera y continua examinando.
No importa qué tipo de pensamiento ocurra, su propia experiencia, en sí misma, es algo no identificable: es consciencia sin obstáculos y, sin embargo, no conceptualiza. En cuanto a las percepciones, son una mera impresión de presencia sin obstáculos, que es insustancial y no un aferramiento a una realidad sólida. Son difíciles de describir como tales, y cuando entiendes que son de esta manera, has alcanzado la experiencia personal.
Sin distraerse entonces, simplemente sostén este vacío consciente que es una conciencia no identificable, también conocida como un vacío perceptor que es una percepción desprovista de una naturaleza propia.
Alguien puede decir: Cuando miro directamente a un pensamiento o percepción, se disuelve y se convierte en un vacío consciente;. Este es un caso de no haber establecido certeza sobre la naturaleza de los pensamientos y las percepciones, sino más bien de usar la idea del vacío consciente como un antídoto contra ellos. (1)
Fin del capítulo
(1) Siempre, en Mahamudra pero también en Zen y otras doctrinas aunque no se diga tan claramente, existe un estadio ya secundario que permite compatibilizar la presencia consciente con el pensamiento grueso reactivo (es decir no forzado por nosotros mismos). Ese es un indicador muy claro para evaluar o auto-evaluar al practicante pues inicialmente no es posible tal como se comenta aquí.
4 comentarios so far
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—Pequeño saltamontes: cuando veas que las llamas de un incendio se te acercan, relájate y obsérvalas. Así lograrás ver el fuego como es…
—Maestro, así lo único que consigo es quemarme…
—Bueno, querido saltamontes, un pendejo más o menos no hace la diferencia…
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Comentario por Tomas morales 09/01/2023 @ 9:09 amRozando el contexto de la entrada, me ha venido a la memoria cómo a veces la mente imagina historias y recrea pensamientos precisamente para generar de nuevo alguna emoción no atendida (no mirada, no abrazada) y por tanto, no trascendida.
Así suele ser habitual entrar en un bucle de pensamientos -sin saber muy bien por qué- provocando que de sopetón surja esa emoción o emociones que aún no fueron atendidas.
Por ejemplo, si le tengo miedo a la rabia, ese miedo bloquea la posibilidad de atender/mirar/abrazar la rabia. Entonces, la mente generará situaciones, recreará situaciones del pasado o se inventará desagravios en el futuro para que la rabia emerja una y otra vez hasta que por fin sea atendida.
A lo largo del texto se usan expresiones como «escudriñar», «investigar» o «examinar»… Estos verbos los entiendo como un «persistir en el mirar»; y aquí «mirar» sería más bien una acción pasiva o no-acción, ese «abrazar» del que se habló en entradas anteriores. Es decir, «escudriñar», «investigar» o «examinar» no sería más que un «posar la mirada sostenidamente en X», sin intención de buscar una solución o respuesta concreta pues la Inteligencia será siempre quien se encargue de ello.
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Comentario por jorgeyordy 09/01/2023 @ 12:10 pmQuiero compartir con vosotros algo que me ha llegado meditando sobre esta entrada y sobre el comentario de Jorge .
Se habla de «vacío consciente» como naturaleza de la mente. En realidad más que vacío consciente utilizaría la expresión POTENCIALIDAD consciente. La mente es pura potencialidad autoluminosa. Puede generar cualquier expresión (pensamiento, sensación, percepción, recuerdo…..etc) que, por naturaleza, será insustancial y se disolverá tal como ha llegado. Potencialidad de todo, permanencia o realidad de nada en concreto. FLUJO. Flujo del ser efímero y leve…¿insoportable? (Kundera) emergiendo del no ser. Parménides tomando té con Heráclito…
Como decían los presocráticos, la muerte (desaparición) es el tributo que se paga por existir y así permitir la posibilidad de que todo sea o pueda ser, compensando a lo que todavía no ha sido.
¿Y qué tiene que ver esto con lo que dice Jorge? El comenta que las emociones se repiten una y otra vez para que sea trascendido aquello que rechazamos o a lo que nos aferramos. Tanto si rechazamos como si nos aferramos perpetuamos algo y eso no puede ser. Nada es perpetuo, ni los mayores imperios. La emoción es un indicador de esa “transgresión”, es un fiel despertador que nos atosigará hasta que miremos de frente, integremos y trascendamos finalmente. Aquello que deja sombra no ha pagado aún su tributo; la emoción sería el gran recaudador que exige su pago, el hombre del frac que pone en tela de juicio la morosidad en integrar….mientras tanto culpa, miedo, sufrimiento acosan al deudor……… hasta la extinción (nirvana) de la deuda. Refranero popular: «el que paga descansa». Alaya queda con un luminoso saldo cero.
Volvemos a lo que decíamos. Somos Potencialidad. Cosificar, hacer permanente, agarrarse, rechazar dando realidad a lo rechazado, son formas de ir en contra de nuestra naturaleza. Ser Potencialidad consciente implica ser cocreadores de mundos, pero nuestras creaciones se auto-escriben sobre la propia claridad autoluminosa y espaciosa que somos, sin artista, obra de arte ni observador de la misma. Conjunción de amor y desapego. Esculpir sobre el agua. Fruición en el Flujo y en el Silencio.
Lo que he comentado me resulta liberador. Lástima que las palabras sólo sean símbolos de símbolos.
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Comentario por Dídac 09/01/2023 @ 7:45 pm«Aquello que deja sombra no ha pagado aún su tributo; la emoción sería el gran recaudador que exige su pago, el hombre del frac que pone en tela de juicio la morosidad en integrar (…)»
Buenísimo ❤️
Qué paradójicos efectos se producen cuando huimos del hombre del frac. A veces nos convertimos en esa sombra que no queremos mirar; otras veces espiritualizamos al «yo» a base de explicaciones tranquilizadoras…
La huida toma múltiples formas.
Creo que asumir esa deuda es de verdaderos valientes, a veces puede tocar remangarse pero definitivamente creo que siempre va a formar parte imprescindible de cualquier sendero espiritual.
Y una buena noticia aunque haga un poco de spoiler: nunca el tributo a pagar es para tanto. Nunca sucede aquello de lo que nuestra cabecita nos previene.
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Comentario por jorgeyordy 10/01/2023 @ 10:01 am