El blog de 道


Vipassana: adquisición de prajna (VII) – Ejemplos
03/10/2021, 7:07 am
Filed under: Uncategorized

Veamos ahora como se establece una práctica vipassana formalmente, aunque como hemos dicho informalmente también funciona e incluso mejor, pero para quién no sepa por donde empezar, pues aquí van unas pautas:

  1. Primero estableceremos una visión que típcamente derivará de las enseñanzas espirituales, por ejemplo de la doctrina Madiamika se deduce que no hay entidades, sino elementos compuestos designados por palabras como objetos, así que primero deberemos entender conceptualmente esto. No tiene sentido pretender realizar nada que no hayamos entendido conceptualmente porque la visión va a ser una deducción conceptual. Si no entiendes el origen inter-dependiente no puedes ver nada al respecto. Es un pre-requisito.
  2. Entendido el planteamiento teórico que toque (el que nos dice en ese momento nuestro maestro, doctrina o nuestra inclinación personal) podemos establecer una visión que también suele tener expresión conceptual, por ejemplo «Todo lo visto es mente».
  3. A partir de aquí podemos abandonar la conceptualidad. De la misma manera que si nos dicen que «busquemos a Wally» en un dibujo, nos lo han de decir con palabras, pero cuando lo buscamos ya no usamos palabras, ¿verdad que no te repites «he de encontrar a Wally» pero lo buscas con la mirada? Pues lo mismo. Repetirlo es una tontería. Buscarlo es lo relevante.
  4. Y empezamos la práctica, sea sentados o en el día a día. Yo recomiendo focalizarnos en el día a día y dejar las sentadas para samatha que solo puede hacerse sentado y vipassana no. Tienes más horas para vipassana que para samatha. Aprovecha. Como los koans, aunque no es necesario ponerse tanta presión, este es un buen ejercicio para casi todo el día. Pero recomiendo hacerlo con tranquilidad y suavidad, sin tensiones.
  5. Como refuerzo sí que se pueden hacer algunas sesiones de vipassana sentados, primero haremos samatha (pacificación)y antes de acabar la sesión samatha podemos hacer un rato de vipassana. Pues en mayor calma, la visión vipassana puede ser más penetrante.
  6. Si hacemos meditación de no-acción samatha y vipassana irán juntos, no son excluyentes tras el kensho. Previo al kensho tampoco, pero como hablamos de que solamente podemos auto-liberar pensamientos quizá te cuesta algo más. En todo caso la meditación de no-acción no es demasiado diferente del mindfulness pero sentados, tanto neutro como no-neutro. En todo caso es genial establecer la visión de «no dirijo mis pensamientos» pues es obvio que no son bienvenidos, pero vienen…
  7. No soy mis pensamientos y no los dirjo. Es obvio, lo sé, lo veo, lo pienso y lo creo pero nada ocurre. Típico ¿no? Pues sí, lo siento. Cuando ocurrirá la realización de algo que ya nos resulta obvio conceptualmente, es un misterio, no sé (¿lo sabe alguien?) porqué unos pronto, otros tarde, otros nunca. Pero no queda otra que insistir, para romper esa extraña y misteriosa frontera entre lo conceptual y lo no-conceptual.
  8. Y finalmente realización o momento Eureka, prajna, sabiduría, ese momento en que «entendemos» y no hace falta más. Hemos entendido de verdad, no hay dudas, ha habido un cambio efectivo y claro que muestra la realización no-conceptual asociada, a veces poca cosa a veces algo muy relevante.  A menudo ni siquiera lo percibiremos como un «entendimiento» sino como un cambio en como funciona la mente, pero alineado con la visión establecida. Por ejemplo, si la visión es «no soy mis pensamientos», quizá lo que ocurra es que de repente puede trascenderlos cómodamente. Has accedido a la mente realizada.

Y ahora vemos algo más aterrizado como ejemplo:

Instrucciones para la adquisición de prajna

Haz práctica samatha (de pacificación) como la hagas habitualmente. Para este primer ejercicio puede ser útil que uses un objeto físico o la respiración para la concentración. Lo que buscamos solamente es calmar nuestra mente para que pueda observar y ver con mayor claridad.

Concéntrate de forma exclusiva en el objeto hasta que llegues al punto en que de forma calmada puedes permanecer sin pensamientos aunque requiera cierta tensión mental (bloqueo de pensamiento por concentración) de forma consistente durante unos minutos.

Ahora pausa esta práctica un momento y obsérvate internamente (abandonas el objeto de concentración). Observa lo que está ocurriendo en tu interior aunque aparentemente no ocurra nada. Hazlo durante unos segundos. No busques nada concreto, ni reacciones a nada concreto. Simplemente observa tu interior, tu mente con ánimo de descubrir qué ocurre realmente en ella.

Ahora vuelve a la práctica samatha, no observes nada en tu interior, simplemente vuelve a concentrarte de forma exclusiva en el objeto elegido, de forma totalmente exclusiva en el objeto de concentración. Sin ni tan siquiera reparar en lo que ocurre a tu alrededor o en la propia sesión.

Y vuelve ahora a observar tu interior. E intenta percibir y entender la diferencia mental entre observar lo que ocurre en tu interior, como haces ahora, de forma inquisitiva y simplemente concentrarnos en nuestro objeto samatha de forma intensamente exclusiva, como hacíamos hace unos momentos.

Ves cambiando de un modo de mirar al otro diversas veces y adquiere entendimiento el «sabor» que tiene cada situación.

Deberías notar que en el caso de la forma de mirar samatha, en cuanto intentes analizar cómo es, lo que te está ocurriendo, si estás en un samadhi o no… en realidad estás en la forma de observar que llamaremos vipassana. Así que no es posible hacer meditación samatha y observarnos al mismo tiempo. En estos momentos, samatha y vipassana son incompatibles.

No dudes en repetirlo muchas más veces de las que parecen necesarias. Y volver a ello de vez en cuando.

Este primer ejercicio de visión clara pretende que nos vayamos habituando a distinguir cuando hay auto-observación y cuando no. No pretende observarse nada más que la propia situación mental samatha frente a la mirada mental vipashyana.

Habitúate a ellas y habitúate a usarlas en cada uno de los entornos donde debe ser usadas, y a no usarlas en cada uno de los entornos en los que no deben ser usadas.

«Mirar(nos)» al estilo vipashyana cuando hacemos samatha no ayuda en nada a obtener absorción/samadhi/jhana.

«No mirar(nos)» como se hace al estilo samatha cuando creemos estar haciendo vipashyana no sirve de nada.

Ahora que ya sabes reconocerlas, usa «cada mente» cuando debe ser usada.

Incluso esto tan sencillo ya es adquisición de Prajna (sabiduría no conceptual sobre nosotros mismos).


Otro ejemplo:

Inicia tu práctica samatha como la hagas habitualmente. Lo único que buscamos inicialmente es calmar nuestra mente para que pueda observar y ver con mayor claridad, por ejemplo, siguiendo con atención nuestra respiración.

Medita así hasta que llegues al punto en que de forma calmada puedes permanecer sin pensamientos aunque requiera cierta tensión mental (bloqueo de pensamiento por concentración) de forma consistente durante unos minutos.

El ejercicio ahora es mucho más retador, una vez en calma intentaremos «solo estar», es decir, estar presentes y conscientes  de nosotros mismos pero nada más. No nos concentramos en ningún objeto concreto, ni físico, ni mental.

Probablmente, tarde o temprano, notarás que tu atención va saltando de un objeto a otro, de una percepción a otra, como aferrándose a una tabla de madera en pleno naufragio.

Ni siquiera es fácil mantener esta situación mucho tiempo sin caer en «el pensamiento reactivo» y de repente encontrarnos pensando en algún tema que nos preocupa y que sabemos que no deberíamos estar tratando ahora..

Cuando te des cuentas de que tal cosa ha ocurrido, obsérvate a la manera vipassana vista en el primer ejercicio.

Ahora, que has retomado el control, tu mente es la mente mindful, está presente y observando, aprendiendo o intentando entender. Reconócela como tal.

Ahora intenta «recordar» cómo era tu mente cuando estaba perdida en el «pensamiento reactivo». En tu ensoñación.

¿Era igual o diferente que la mente actual? ¿se sentía igual? ¿qué diferencia se percibía si se percibía alguna? ¿puedes recordarla? ¿era samatha, vipashyana (tal como vimos hace dos días) o ninguna de ellas?

¿Quién decidió «ponerse a pensar»? ¿pudiste verlo? ¿cómo se hizo el paso de la mente mindful, cuando estabas atento a esa mente reactiva que «quiere» pensar y no meditar?

¿Por qué y cómo se «olvidó» que estábamos meditando y no tocaba pensar?

¿El pensamiento surgió lo primero o hubo algo antes? y si es que sí, ¿qué?

Y después, ¿cómo ocurrió que pasamos de nuevo de la mente reactiva a la mindful? ¿pudiste verlo? ¿quién hizo el cambio y por qué? ¿un recuerdo, un pensamiento, una intención física, una percepción?

¿Cómo recordaste que debías volver a «meditar»?

No verbalices estas preguntas. Simplemente observate para ver si encuentras respuestas (tampoco verbalices respuestas).

Puedes usar solo una pregunta en cada sesión y puedes hacerte otras que te parezca a ti que tienen más sentido.

Intenta mantener la calma durante todo el proceso. La situación emocional ideal es siempre la ecuanimidad, independientemente de si la sesión va bien o mal (que nunca va mal, realmente).

Ahora desde la mente mindful decide olvidarte de observar, atender o cualquier otra cosa, solo quieres revertirte a la mente reactiva, quieres olvidarte de ti mismo y dejar que la mente piense por sí misma reactivamente. Quieres abandonarte a la mente reactiva.

¿Cómo harás tal cosa? ¿sabes cómo volver a la mente reactiva? ¿cómo se hace? ¿lo logras? ¿cómo? ¿ocurre? ¿por qué?

Repite el ejercicio a menudo e intenta encontrar la respuesta a todas esas preguntas y otras muchas que puedan surgirte. La respuesta verbalizada no es relevante y no es necesario obtenerla, lo que es relevante es invetigar y ver con claridad lo que ocurre (o no ver con claridad lo que ocurre, pero saber que no vemos con claridad).

No es en absoluto fácil tener una visión clara de lo que ocurre en la mente reactiva, no te preocupes si no ves todavía con claridad. Pero observa inquisitivamente y cada vez será más claro lo que está ocurriendo. Y sobretodo, debería llevarte a dudar y preguntarte, ¿por qué pasan estas cosas? ¿coincide lo que pasa con mi creencia de lo que soy y lo que es la mente?

Incluso no ver con claridad esta situación ya es adquisición de Prajna.

Existen en el blog algunos otros ejercicios como estos, aquí (siete entradas).

Eso es todo por ahora.


Deja un comentario so far
Deja un comentario



Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.



A %d blogueros les gusta esto: