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Ahora bien, la propuesta de las religiones asiáticas no es que no sea compresible, se puede ver de donde surge.
Porque como hemos dicho, por primera vez, cuando despiertas, la mente consciente da un paso en el vacío con el que se conoce a sí misma como auto-existente, por primera vez, repito puede existir de forma autónoma. Esa mente consciente dando un paso al vacío y la auto-existencia pura es la mente despierta, inicialmente nada más.
Por tanto la vivencia sí que es de que “ahora SOY de una forma mucho más pura que antes”, “de forma más profunda y nuclear que antes” dado que ningún contenido mental se apega a mi eseidad. La puedo vivir en su pureza. Por eso se suele hablar en el advaitismo de consciencia pura.
Y eso va a ser independiente (y por eso en ello coinciden budismo y hinduismo) de si esa ese-idad pura es eterna o compuesta e impermanente.
De nuevo, afirmar una cosa u otra de las anteriores (si es eterna o no) es mero dogma, respetable pero dogma. No hay pistas en la mente despierta que te permitan decantarte por una de esas dos opciones. No se capta ninguna “eternidad” concreta que no sea la atemporalidad del más puro ahora, y por tanto ambas propuestas podrían ser ciertas o falsas.
Lo que sí se capta con claridad es que “soy” y “soy más allá de los contenidos mentales”.
Punto.
La no-conceptualidad que pueda tener asociada (pero que también puede tener la mente mindful o consciente) profundizada, nos lleva a cierta atemporalidad, por deconstrucción mental de pasado y futuro, pero ese es otro tema…
Seguimos: en el mini-libro Dinámicas de realización se busca expresar eso mismo de otra manera y para ello usa el truco, tan habitual en espiritualidad, de decir “lo que no es”, en lugar de afirmar lo que creemos que es.
Y la mente despierta lo que no es, es ningún contenido mental, pues existe de forma autónoma a ellos.
No es lo visto, ni lo oido, ni lo sentido, ni …
Pero todo esto tampoco lo era la mente mindful.
¡Ah! pero es que tampoco es “lo pensado”.
Y eso es nuevo.
Si recordais, dijimos que tenemos un problemilla con “lo pensado” y es que nos absorbe con gran fuerza. Y eso es así, porque realmente creemos ser lo pensado, creemos ser nuestros pensamientos. O dicho de una manera más precisa, en cuanto aparece el pensamiento intelectual, nuestra identidad es arrastrada dentro.
Y eso justo es lo que no pasa en la mente despierta.
Así que una forma razonable de definir la mente despierta puede ser “vivir por primera vez que no soy mis pensamientos”. Y esa es la definición que se usó en el mini-libro.
6 comentarios so far
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Gracias…
Lo curioso que me parece es que con lo clara, sencilla y novedosa que se siente, se pueda perder. Con lo evidente que se siente ahí que hacemos esfuerzo sin darnos cuenta para estar ahí, se pueda perder de nuevo. Porque si algo parece claro ahí, es que es hipersimple y sin embargo, en un día o en horas se desvanece. Aunque he de decir que tus pautas y detalles diseccionados ayudan muchísimo a ver que lo a-causal en absoluto es azaroso.
Fantástica serie!
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Comentario por Jose 16/01/2018 @ 10:56 amMuy amable 🙂
Pues aún queda, esta es una macro-serie, quizá un mini-libro… 🙂
Muy buena frase. Así es. 🙂
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Comentario por 道 16/01/2018 @ 11:21 amNo es lo visto, ni lo oido, ni lo sentido, ni …
Pero todo esto tampoco lo era la mente mindful.
¡Ah! pero es que tampoco es “lo pensado”.
Y eso es nuevo.
Entonces cuando practicamos Mindfulnes todavía estamos apegados a ciertos pensamientos, de una forma más o menos menos sutil, pensaba que no pero me he dado cuenta de que la presencia sigue siendo un pensamiento…
Muy motivador y aclarador el tema tratado.
Gracias!
🙏
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Comentario por ewilius 16/01/2018 @ 11:27 amEsta es una realización importante. Me alegra que lo veas. Pues muestra las limitaciones de la mente mindful.
Con tu permiso lo redactaría de una forma ligeramente diferente.
La mente mindful establece la presencia mediante la atención sostenida a un contenido mental no intelectual. Sea el que sea, sutil o no sutil.
Por ejemplo atendiendo fuertemente a lo que ves o a lo que oyes etc…
Es un proceso mental de ese tipo.
Así que no es realmente Presencia, es más un forzarse a «solo oir» o «solo ver» o «solo seguir la respiración» o «solo sentir todo el cuerpo», etc…
Todavía no es Presencia pura pues realmente todaví no puede «solo-ser».
Y cuando intentamos estar presentes sin contenidos, realmente creas algo sutil que es quizá a lo que tú te refieres, intentamos no aferrarnos a nada y en cierta manera nos aferramos a la intención de no aferrarnos a nada. Raro de explicar pero intuyo que me vas a entender. SIgue siendo el mismo juego usando un objeto más sutil…
Pero desde la mente mindful siempre estamos «aferrados a algo» con fuerza para evitar el surgimiento del pensamiento conceptual que nos revierte a la mente inconsciente. Es eso lo que quiero decir cuando digo que la mente mindful puede ser no-conceptual o sentir lo que se suele llamar «no-mente» pero de forma forzada, por bloqueo.
Cuando sientas esa «no-mente» pero sin esfuerzo alguno, como ocurriendo sola y por sí misma, está en la mente despierta.
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Comentario por 道 16/01/2018 @ 11:58 amVer aparecer ese esfuerzo por mantenerme en la presencia y dar un paso atrás, perseverar hasta que que el mismo tienda a cero, acostumbrarme a ese estado como el que se adapta al agua fría en el mar, el cerebro por sí mismo hará los cambios en las conexiones de las neuronas, no puedo ir más allá. ¿ No?
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Comentario por ewilius 16/01/2018 @ 12:21 pmMuy «Gary Weber». 🙂
Sí, más o menos debe ocurrir eso. 🙂
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Comentario por 道 16/01/2018 @ 4:43 pm