Filed under: Prosa, Uncategorized | Etiquetas: Gato, Marvin, Prosa, Texto propio
Hace unos diez años escribí esto:
Marvin es una princesa.
Y eso a pesar del nombre. Y es que Marvin era un gato, hasta que visitamos el veterinario y nos dijo que no, que era una princesa.
De pequeños es fácil confundirse en eso.
Marvin es de padres desconocidos. Nació hace un par de años en Cervelló, en el jardín de unos amigos. La encontraron, aún con el cordón umbilical y la acogieron.
Era como una ratita que no paraba de berrear. Necesitaba padres y cariño, así que la adoptamos.
Marvin vivió su primer año de vida con Passarell. Quiero creer que ayudó a hacer más entretenidos sus últimos días. Aunque él, tranquilo y torpón se la miraba como a un marciano y se sacudía con afectación de marqués sus abrazos y juegos.
Porque Marvin no es como Passarell ni como el loco Horatio. Cada ser es único y diferente.
Marvin es tranquila y felina, silenciosa, altiva y solitaria. Come poco y siempre está en los huesos, tiene un tipito de modelo de pasarela, el que corresponde a una princesa.
Le encanta beber de cualquier lugar siempre que no sea su bol de agua. Si te lavas las manos, viene a beber. Cuando acabas en la ducha viene a beber. Del agua que queda en los platos por lavar, bebe. ¡Incluso ha bebido infusiones de mi taza!
No le gusta que la abraces y nunca la oí ronrronear.
Dice una leyenda sin confirmar (difundida por Marta) que si pones el oído tocando a su cabecita y la acaricias, a veces, sólo a veces, puedes oir muy débil un lejano runrun, que quizá ni existe, pero hace ilusión pensar que sí, que es feliz en esos momentos.
Si la coges y abrazas, mira hacia otro lado y aguanta estoicamente apenas unos segundos. Luego empuja con sus patitas para que la dejes. Si la besas, pone cara de “que paciencia hay que tener con los padres” y estira el cuello para huir.
Eso sí, nunca correría el riesgo de dejar que pensases que no te aprecia. Por eso, cuando llegas a casa se restriega contra tus piernas y te sigue allá donde vayas durante los primeros minutos. La cabeza bien alta, como mirándote con adoración.
Si estás en la sala, ella duerme en el sillón. Si vas a la cama, descansa a tus pies. Su silenciosa compañía es su forma de decirte que te quiere.
A veces, cuando Horatio se tumba con nosotros y ronrronea ruidosamente mientras le hacemos caricias, ella mira. Mira con una mezcla de envidia y sorpresa, como si también quisiera pero no supiera como.
Odia que Horatio intente abrazarla y saltarle encima. Suena a justicía divina pues es lo que ella hacía a Passarell.
A veces, cuando duerme, sueña.
Sí, los gatos sueñan.
Y no sé con qué exactamente, pero a veces en sueños mueve la boquita y hace ruiditos, como si mamara. Y pienso que sueña que es pequeña y nunca ha perdido a su madre.
Así es nuestra princesa melancólica.
Como el humo perfumado del incienso, liviano y maravilloso, se eleva hoy el alma de Marvin al cielo de los seres puros y sin voz.
Puedan todos los seres ser felices.
Marvin alcanzó su cuerpo de arco-iris este 13 de Octubre de 2.017
10 comentarios so far
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Un día correremos la misma suerte…
Bello escrito, bella Marvin
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Comentario por Jose 14/10/2017 @ 1:15 pmPuedan todos los serea ser Felices.
Gracias.
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Comentario por piramider 14/10/2017 @ 2:23 pmAntes de nada un gran abrazo, entiendo.como te sientes.
Hace años de un día para otro mi perro enfermó, y en la operación se murió, nunca lloré tanto en mi vida y eso que perdí a mi padre y a una tía que era la persona que más me entendía en este mundo, cosa no fácil.Que no se me entienda mal si tuviese que elegir entre mi perro y mi padre o mi tía pues seguramente los hubiese elegido a ellos, pero el dolor y la tristeza que sentí por el pequeño Bulldog francés no lo sentí nunca por nadie ni por nada, creo que me sentía y siento un poco culpable por lo que le pasó… ojalá pudiese rectificar lo que hice mal.
Se llamaba Tao.
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Comentario por ewilius 14/10/2017 @ 11:09 pmEstoy releyendo lo que escribí y tal vez no era el momento, no por nada, es el momento de Marvin, una ceremonia muy bonita , unas palabras hermosas.
Un abrazo
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Comentario por ewilius 14/10/2017 @ 11:40 pmCuando era un chaval de 12 años murió mi perro; aún puedo recordarlo mientras le acariciaba, sus ojos, ..él sabía que se moría…lo único que podemos hacer es dar consuelo y cariño..Como dice José algún día correremos la misma suerte.
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Comentario por Bernat 15/10/2017 @ 12:52 pmUn abrazo, Tao.
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Comentario por Codorníu 16/10/2017 @ 6:59 am…
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Comentario por marcos 18/10/2017 @ 11:26 pmMe emocionó este escrito. Bellas palabras para un bello ser.
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Comentario por Lú Delgado 07/11/2017 @ 5:29 amVaya, llego a esta entrada por el lector, un poco «por casualidad». Hermosas palabras y hermoso recuerdo para un ser hermoso. Sí, la vida es tan bella y frágil… y finita, ¿verdad? Eso la hace más valiosa y preciosa aún.
Eres una gran persona paradójica y aparentemente no-persona. ¿Se entiende esto? Seguro que sí.
Me he visto, «inexplicablemente» reflejado en Marvin. He sentido que era ella…
Un abrazo.
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Comentario por अनत्ता 光 心 23/10/2022 @ 10:16 pm❤
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Comentario por 道 貓的僕人 24/10/2022 @ 6:51 am