El blog de 道


Realidad y existencia, conceptos vacíos (I)
24/06/2017, 7:55 am
Filed under: Reflexions | Etiquetas: , , , , , , ,

¿Qué es real? ¿qué existe y qué no existe?

Tras la respuesta a estas preguntas hay grandes disensiones entre doctrinas, discusiones eternas y posturas irreconciliables, pero raramente entre sabios, la razones las veremos en el texto.

¿Qué es real? ¿qué existe?

La respuesta es tan sencilla que asusta que el ser humano siga discutiendo sobre ello:

Depende.

¿Y de qué depende?

Pues obvio, como siempre, de como definas «real» o «existente».

¿Algo tan fundamental como el concepto de existencia y resulta que proponemos que es subjetivo?

Pues sí, totalmente, como todo. Cualquier expresión de conocimiento, transmisión de conocimiento, es subjetiva porque depende del significado que demos a sus símbolos (palabras) y ese significado a pesar del esfuerzo de la RAE, es subjetivo.

Es por eso que una doctrina puede decir que algo es real y que para otra no lo sea.

Independientemente de que estén mirando la misma realidad.

¡Independientemente de que estén entendiendo la misma realidad!

Por eso casi todas las doctrinas al final crean su propio lenguaje, y cada palabra, en cada doctrina, quiere decir una cosa sutilmente diferente que en la otra doctrina, de tal manera que la discusión ¿real o no real? se vuelve ridícula, pues cada doctrinas quiere decir una cosa diferente.

Fíjate que normalmente asumimos que otro lenguaje es aquel para el que dados los mismos significados cambia el significante (la palabra). Es decir que el inglés es otro lenguaje porque para la idea «burro» expresa donkey.

Pero también es otro lenguaje (quizá lo veo claro porque vengo del mundo de «los lenguajes técnicos») aquel en que para los mismos significantes cambia el significado. Por ejemplo si cuando digo «burro» quiero decir cierto tipo de máquina muy especializada y no un animal.

Es decir, cualquier cambio extenso de la relación significante-significado da lugar a un nuevo lenguaje o forma de comunicarse, pero que deben conocer ambas partes. Si no, la comunicación no es posible, y se produce la confusión y las malintepretaciones.

Esa creación de un nuevo y sutil lenguaje es imprescindible para reducir la subjetividad de lo que se pretende trasmitir en espiritualidad, que ya es suficientemente sutil. Para que lo entiendas mejor, vamos. Pero a cambio, inicialmente, complica el acceso inicial a la doctrina hasta que logras entender su lenguaje. Y eso también hace que algo tan de moda, como las frases sin contexto tan habituales de las redes sociales, se vuelvan tremendamente fáciles de malinterpretar, puesto que el receptor no conoce el lenguaje.

Y lo curioso es que todo esto ocurre de forma tan sutil que aparentemente no nos damos cuenta. Damos valor absoluto a las palabras y discutimos sobre símbolos, cromos, mapas, estampitas, que no solo no son nada concreto sino que para cada uno de nosotros significan cosas diferentes.

Pongamos un ejemplo con el Budismo y el Vedanta Advaita.

El Vedanta Advaita tradicional, afortunadamente, y no pasa mucho, ha definido con notable precisión que significa «real» para ese dogma.

La definición de «real» del Advaita Vedanta es sencilla y concisa: es aquello que no cambia, o dicho en negativo, como se suele hacer tradicionalmente: todo lo que cambia no puede ser real.

Es una definición tan válida como cualquier otra, simplemente no es universal, es arbitraria, es la que esa doctrina ha decidido para sí, y otra persona puede opinar que «real» es otra cosa y ambos tienen la misma autoridad para ello.

Basándose en esa definición, como vemos que todo cambia, concluimos: solo atman/brahman puede ser real, porque es lo que dice nuestro dogma que no cambia (aunque no sepamos ni lo que es ese Atman/Brahman).

Entonces cuando un texto o un maestro Vedanta dice «la mesa no es real», debemos entender que estamos diciendo simplemente «la mesa cambia, no es permanente». Y no añadir nuevas propiedades a nuestra definición de real… como por ejemplo que la mesa es un sueño, que no está ahí, etc…

Porque si no lo hacemos así empezamos a liarnos… porque quizá hemos «ampliado» sin darnos cuenta y sin avisar a nadie nuestra definición de «real» que ya no es la que nos proponía esa doctrina…

(continua)


15 comentarios so far
Deja un comentario

¿A ver si todo es impermanente, sin nada que escape a esta manera de existir?

Considerar que pueda haber algo que «no tiene principio ni fin» es una creación de la mente, que necesita suponer que algo, al menos algo (se llame como se llame), escapa a tal denominador común de existir.

Ni siquiera la vacuidad se escapa de estar vacía de existencia inherente.

Desde luego, con la razón, solo utilizando la mente conceptual no creo que se pueda llegar más lejos.

Quizá más allá de la mente tenga sentido la apercepción de un Único eterno, pleno y amoroso. Afortunado aquel que reciba esa gracia.

Un abrazo.

Le gusta a 2 personas

Comentarios por Codorníu

Muy sabio. Codorníu.

Me gusta

Comentarios por

De acuerdísimo! 🙂

Le gusta a 1 persona

Comentarios por anemikaela

Me gusta

Comentarios por

Sólo queda claro (real) que nos has llamado «burros» XDDDD

Me gusta

Comentarios por maikerutenshi

😀 😀

Me gusta

Comentarios por

Y no sería más fácil que dijeran «la mesa cambia» en vez de «la mesa o la pared no es real o es vacua»?

Le gusta a 2 personas

Comentarios por Jose

Y si cambia… ¿en qué sigue siendo una mesa y en qué aspecto ha dejado de serlo?
Y si hay algo por lo que ya no lo es… ¿por qué mantener el nombre y el concepto?

A mi modo de ver, ese empeño de mantener el nombre y el concepto…

…es precisamente la proyección mental que se etiqueta fuera sobre Eso que cambia, pero que nunca podemos percibir.

Le gusta a 1 persona

Comentarios por Codorníu

Respondiendo a Jose.

En mi opinión sí, pero existe un fenómeno, que creo que no ayuda sino que complica el camino espiritual que es la tendencia a la mistificación y la grandilocuencia tradicional de la religiones y doctrinas místicas.

Y suena mucho más rotundo decir «solo atman es real» que «solo atman no cambia», a lo segundo un occidental casi que la frase le parecería tan débil que pensaría:

¿Y qué?!?!

Hay palabras con más poder que otras, si decimos a un cristiano «solo la Santísima Trinidad es real», seguramente afirme con la cabeza, y la verdad es que no creo que ninguno de nosotros tengamos demasiado claro qué se quiere decir con ello… pero suena poderoso y cierto… estando vacío…

Le gusta a 1 persona

Comentarios por

Gracias…

Lo decía porque si cambia aunque me choque me hago daño, si es vacua e irreal la traspaso 🙂 con lo que a pesar del limitado lenguaje en una me llevo un chichón.

Me gusta

Comentarios por Jose

Bueno, aquí aparece de nuevo el problema de definiciones, para ti real es equivalente a sólido… 🙂 o mejor, asumes que todo lo sólido es real. Para un vedanta real es simplemente impermanente, su solidez o no es irrelevante.

Si no se acuerda antes una definición de real (ambas son igualmente buenas o malas) el debate es imposible.

Me gusta

Comentarios por

Explicar el chichón es complejo. Pero una hipótesis podría ser esta:

Yo creo que todo el mundo fenoménico está en permanente cambio, como si fuese un magma donde todo son posibilidades de ser «esto o aquello, aquí o allá, así o asá».

Algo así como una máquina de monedas (frutitas, símbolos geométricos, etc.) que hay en los bares, pero a lo bestia con millones de «ruedas». Imagínate!

Es el observador quien, al percibir el magma, «fija» una combinación de la maquinita en cuestión (como a un preso en fuga, cuando se queda inmóvil al notar sobre él la luz de un potente reflector), y aparece ante el observador un mundo en el espacio-tiempo.

Vaya, como si la observación hubiera «cosificado» una posibilidad entre triillones de triillones.

Y, claro, una vez «cosificada» (hecha la foto fija), tanto la mesa como tú os pegáis el mamporro.

Lo que no invalida que la Realidad (la verdadera) sea un magma pleno de impermanencia.

Así que hay que poner atención al conducir, jaja…

Me gusta

Comentarios por Codorníu

Algo tan sencillo como definir de que se está hablando es fundamental para no discutir o dialogar de cosas diferentes pensando que cada uno tiene el mismo concepto en mente.

Yo intento en los grupos de amigos cuando sales temas de cambio personal o espiritual de definir conceptos y descubres que se puede estar horas hablando de si existe o no Dios y no tener definido antes el concepto de Dios.
¿Cuantas veces cuando hablas de temas abstractos comienzas definiendo el término?

Le gusta a 1 persona

Comentarios por gcalabro1

Bienvenido gcalabro…

Tienes toda la razón, con «dios» ocurre exactamente lo mismo… un comodín para lo que se tercie… 😀 😀 😀

Me gusta

Comentarios por

La mayoría de la gente ( cristianos practicantes o no) que dice creer en Dios no tiene muy claro en qué cree, según mi experiencia la mayoría se lo imaginan como «algo» invisible y limitado que controla el Universo y toma decisiones como si fuese un humano…
Y eso que en la misma Biblia dice que Dios está en todas partes , que es lo mismo que decir que lo es todo , incluídos cada uno de nosotros, pero eso les da vértigo y si se lo dices parece que estás cometiendo una herejía…

Le gusta a 1 persona

Comentarios por ewilius




Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.