Filed under: Descripcions | Etiquetas: Auto-realización, Budismo, Consciencia, Descripcions, Espiritualidad, Libre albedrío, Mahayana, Texto propio, Vajrayana
“Te amaré siempre”, una frase obviamente falsa…
Uno dice “te amaré siempre” y unas horas después está en el trabajo estresado, agresivo y lo que menos siente es amor por ser vivo alguno.
Así pues ese “te amaré siempre” te ha durado apenas minutos. Ahora ya no estás amando a nadie… tampoco a él/ella
Sin embargo si te preguntaran por tu amada dirías “la sigo amando, por supuesto”, pero ¿sientes amor en ese momento de estrés?
Obviamente no, estás mientiendo… Ahora NO la amas… a nadie…
Pero el ser humano necesita continuamente re-crear ese espejismo de la permanencia (también de ideas, promesas y sentimientos), es compulsivo, no podemos evitarlo. Es parte de nuestro estado de ignorancia y la auto-observación es la herramienta para deshacerla (prajna, entendimiento).
Sin embargo no es como si la hubieras dejado de amar, ¿no? de alguna manera sabes que la amas. Es decir, que cuando seas capaz de amor (por ejemplo esta noche, olvidado el trabajo) y pienses en ella o la veas, la amarás. Eso es lo más que puedes decir siendo sincero…
Se ha establecido una “corriente mental” que no es que sea permanente (de ahí la falsedad del: “siempre”) pero está ahí… en algún lugar de la mente, siempre disponible pero no siempre activa.
Ese tipo de “corrientes mentales” son lo que en otros contextos llamamos “huellas o tendencias kármicas“. Según el budismo estos condicionantes kármicos se almacenan en lo que llaman Alaya, la consciencia-almacén, la octava consciencia.
De ella surgen todos nuestros comportamientos kármicos, es decir, todos nuestros comportamientos influidos por acciones pasadas y… por algo más… (luego lo veremos).
Alaya no es solo memoria, aunque requiere de memoria, puesto que no es simplemente que vea un cuadro y recuerde haberlo visto, sino que hay asociada una pauta de comportamiento a ese recuerdo, por eso es una huella kármica y no simplemente memoria.
Esto no es diferente de lo que en hinduismo llaman Samskara, lo cual es razonable pues ambas religiones comparten la idea de karma.
La espontaneidad entonces es la acción no basada en Alaya o Samskaras, es decir no condicionada por huellas kármicas sino condicionada solo por el Ahora (pues la acción no-condicionada no existe).
Por supuesto toda acción requiere usar ciertos automatismos mentales (incluso caminar) y parece difícil marcar la frontera donde un automatismo, como caminar, deja de ser una huella kármica para ser solo una reacción pura.
Parece evidente que estornudar es espontáneo y tener una ganas locas de ver a tu amada/o es fruto de una huella kármica. Pero hay toda una escala de grises del uno al otro…
Sin embargo existe un factor diferencial relevante para establecer la diferencia entre espontaneidad y acción kármica: el establecimiento de una huella kármica requiere de la creencia en un sujeto permanente en el tiempo.
Es decir, si yo no creo en un sujeto permanente en el tiempo, jamás creeré “amarte siempre”. Eso es un sin sentido desde esa perspectiva… Y al no creerlo, no crearé una huella kármica en Alaya. Mi amor por ti será espontáneo cada vez que te vea, o no será en absoluto… y no me sentiré mal por ello…
Una “corriente mental kármica” establecida hacia el futuro, solo se establece por la creencia en un sujeto existente en ese futuro (y que se asume que es el mismo que el actual). En caso contrario no tiene sentido y no se establece.
Es por ello que quién permanece anclado en el Ahora o ha superado la creencia en un sujeto, no establece con facilidad huellas kármicas, incluso aunque hay que decir que las huellas kármicas no se establecen “por fuerza de voluntad” o deseo de un sujeto, sino de formas subconscientes, más allá de cualquier decisión y basadas en creencias y tendencias profundas.
Por eso uno “ama para siempre” a alguien y no sabe ni por qué, en cambio se propone “dejar de fumar” cosa que es muy razonable, y no hay manera de lograrlo…
Tú no decides o eliges tus huellas kármicas, como no decides ninguna otra cosa (porque no hay un “tú” decidiendo cosa alguna), simplemente estas se establecen si hay ignorancia (de lo que somos) o no se establecen si no hay ignorancia.
Y es por eso que Buddha dijo que el ser liberado no está sujeto a las leyes del karma.
6 comentarios so far
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Añadido de última hora:
Es por el hecho de que las huellas kármicas se establecen por procesos conscientes pero también subsconscientes, que no es suficiente con una mente vacía de pensamiento consciente para acabar con nuestro karma (o samskaras) y liberarnos. El sufrimiento sigue ahí, podemos disociarnos de él si hemos Despertado, pero seguirá ahí.
Por eso que la mente-sin-pensamiento (consciente) no es la liberación, pero sí una experiencia relevante.
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Comentario por 道 10/11/2015 @ 12:43 pmMe parece una explicación muy clara y acertada. Yo suelo vincular el karma con los procesos de aprendzaje que se producen de manera innata pero creo que de esta forma se comprende mejor. Abrazos
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Comentario por meditacionmadrid 11/11/2015 @ 4:12 pmesas tendencias kármicas que generan un comportamiento compulsivo alimentado por un intenso deseo de vaivén y que se pueden satisfacer con cierta facilidad, como el vicio de fumar, son muy difíciles de eliminar.
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Comentario por bernat 11/11/2015 @ 4:37 pmCierto, aunque no es lo mismo tendencia kármica que adicción, en lo segundo participa además una necesidad corporal (la adicción) que aún lo complica más todo.
Igualmente quisiera volver a insistir sobre esto:
Y viceversa
Tú no eliminas tus huellas kármicas, como no eliminas ninguna otra cosa (porque no hay un “tú” eliminando cosa alguna), simplemente estas se eliminan progresivamente si no hay ignorancia (de lo que somos) o no se eliminan si hay ignorancia (o en todo caso caen unas, surgen otras, etc… todo en función de las condiciones)
Nótese el “progresivamente”.
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Comentario por 道 11/11/2015 @ 5:11 pmBuenos días,
“hay que decir que las huellas kármicas no se establecen “por fuerza de voluntad” o deseo de un sujeto, sino de formas subconscientes, más allá de cualquier decisión y basadas en creencias y tendencias profundas.”
Sin embaro, en el Theravada creo que se le da una importancia fundamental a la volición como “generador de karma”, de hecho, ellos dicen que los actos no volitivos no son karma…¿es porque la volición tiene la propiedad de programar Alaya? ¿es la volición solamente capacidad de programación? y si es así, entiendo que un acto volitivo que se transforme en hábito condicione tu vida y por lo tanto tu experiencia (concepto clásico de karma como causa-efecto) pero, ¿tanta fuerza tiene un acto puntual volitivo como para programar Ayala y condicionar tu vida?
Ahí queda eso… 🙂
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Comentario por JL 28/06/2018 @ 8:41 amLa fuerza de voluntad es el resultado de una huella kármica y no al revés… Idem con el deseo. O sea que estoy de acuerdo,
Las creencias y tendencias profundas son Alaya.
Uno no modifica Alaya de forma directa. Más que nada porque no hay un “uno”, lo que llamamos “uno”, la persona en acción, es el resultado de Alaya. Es decir, todo es al revés de como lo suponemos habitualmente por personalizar continuamente.
El texto que citas por tanto me cuadra.
Es una visión kármico-ética. No entro. Desde mi punto de vista cualquier acto genera karma.
Aquí por volitivo se quiere decir intencional. Es decir que “lo estoy haciendo conscientemente”. Y eso es otra cosa. Volición es ser capaz de hacer cosas como ” voy a meditar cada mañana”. Al menos yo lo entiendo así.
Si me caigo sin querer y mato una hormiga, eso genera karma. La hormiga no va a dejar de morirse porque sea no intencional (no era mi intención lograr eso). Y si en lugar de eso es una serpiente y me muerde y me quedo paralítico, ¿Eso no es karma?
Todo va a depende de como definas karma.
Si como una forma de recompensa ética universal o como simplemente la causa-efecto universal.
No la tiene. Es el resultado de Alaya.
No, la volición es solo una corriente en Alaya encaminada a una acción futura. Por ejemplo marcar en Alaya: “debo no fumar, NUNCA más” o “debo meditar cada mañana”.
La programación de Alaya no la ejecuta la voluntad. Sino que la voluntad es el resultado de huellas en Alaya.
¿Quién programa Alaya? Todo el universo, la red de Indra, todo lo que te pasa. Absoultamente todo lo que te pasa va construyendo Alaya ladrillo a ladrillo.
Cualquier hábito condiciona tu vida, da igual si el origen es volitivo o no. Vease el ejemplo de antes de la serpiente.
El mismo que cualquier otro, incluso la caida de una manzana en tu cabeza puede condicionar tu vida de arriba a abajo. Efecto mariposa.
Un abrazo.
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Comentario por 道 28/06/2018 @ 9:15 am